miércoles, 12 de junio de 2013

Bizcocho de flan (o natillas)

El otro día preparé una tarta muy especial, era para mi tía Carmen que cumplía años... yo soy de innovar de vez en cuando (a veces demasiado a menudo y así me va jejeje yo y mis experimentos), sobretodo suelo arriesgar con las tartas que hago para la familia directa claro... y esta vez lo hice.

Tenía en el armario dos sobres para hacer flan o natillas, y no los iba a gastar en breve, así que decidí darle ese toque al bizcocho a ver qué tal quedaba y qué tal sabía. La verdad, que el resultado me encantó, quedó un bizcocho jugoso y tenía un sabor que no sé explicar, suave avainillado pero no sé porqué me recordaba como a mi infancia... era diferente a los típicos bizcochos, aún cuando les echo esencia de vainilla no saben como éste.
La receta no la saqué de ningún sitio en especial , quiero decir, a veces busco recetas cuando quiero hacer algo en concreto, como hice por ejemplo con el Devil's Food de chocolate y miro unas cuantas y luego decido cuál hacer. No se me pasó por la cabeza que pudiera ser popular hacer bizcochos de flan (consistentes para cubrir luego la tarta con fondant), así que la hice como me pareció y me apunté las cantidades por si me salía bien compartirla con vosotr@s.

Así que aquí os dejo el resultado: 


Lo hice en un molde de 20 cms pero no me quedó muy alto, así que si lo queréis más alto hacerlo en uno de 15 cms o bien variad las cantidades de forma proporcional.

Ingredientes:

300 grs de harina de trigo
250 grs de azúcar
2 cdtas. (de las de café) de bicarbonato
300 ml leche
200 grs mantequilla
2 huevos
1 sobre de flanes y natillas Potax

Preparación;

Ponemos el horno a calentar 170 grados.

En un bol batimos los huevos con el azúcar, cuando doblen su volumen, añadimos la mantequilla a temperatura ambiente a dados, y seguimos batiendo.
Luego la leche y el sobre de flan, seguimos batiendo hasta que no queden grumos. Por último, tamizamos la harina y el bicarbonato y lo añadimos y seguimos batiendo.

Yo forré con papel de horno el molde, si no queréis hacerlo así, podéis engrasarlo con mantequilla o aceite para que se desmolde luego fácilmente.

Ponemos la mezcla en el molde y lo introducimos en el horno. Dependiendo del horno tardará más o menos tiempo, dejarlo unos 40 minutos y a raíz de ahí cuando veáis que empieza a coger color lo podéis pinchar con una brocheta, cuando salga limpia, estará hecho. Yo lo tuve cerca de una hora pero mi horno no es muy potente.

Os dejo fotos del corte de la tarta que hice para que veáis el resultado, aunque lo mejor es que la hagáis y lo probéis porque os va a encantar.

Ya me contaréis!!!


 La rellené con un Swiss meringue de albaricoque y vainilla

1 comentario:

Matilde dijo...

Que delia que bueno ademas se ve que tienes mano en este ripo de postres.